El cogollo de la cuestión
La imagen la robé aquí
Ése es el punto exacto en el que me encuentro, el puto cogollo de la cuestión. Lima, 15 de agosto de 2007, terremoto de 7,9 en la escala Richter, el más grande de los últimos 50 años, y yo lo vivo solita, aunque rodeada de gente histérica que llora y reza, en la Plaza de Armas (el centro neurálgico de la ciudad), sin pasaporte ni móvil ni tarjetas de crédito, con 43 soles en el bolsillo (menos de 11 euros) que no me dan ni para el taxi al aeropuerto. Os parece un buen comienzo para una novela? Por lo menos para un relato corto sí que da, no? Joder, joder, esto se sigue moviendo. En fin, mañana más, que ahora necesito una ducha y una cama, ha sido un día muy duro precedido por una semana larguísima y el hotel en el que nos alojamos por cortesía de esa mierda de compañía que es Gol está que te cagas.
Ése es el punto exacto en el que me encuentro, el puto cogollo de la cuestión. Lima, 15 de agosto de 2007, terremoto de 7,9 en la escala Richter, el más grande de los últimos 50 años, y yo lo vivo solita, aunque rodeada de gente histérica que llora y reza, en la Plaza de Armas (el centro neurálgico de la ciudad), sin pasaporte ni móvil ni tarjetas de crédito, con 43 soles en el bolsillo (menos de 11 euros) que no me dan ni para el taxi al aeropuerto. Os parece un buen comienzo para una novela? Por lo menos para un relato corto sí que da, no? Joder, joder, esto se sigue moviendo. En fin, mañana más, que ahora necesito una ducha y una cama, ha sido un día muy duro precedido por una semana larguísima y el hotel en el que nos alojamos por cortesía de esa mierda de compañía que es Gol está que te cagas.
posted by emereci at 1:03 a. m.
7 Comments:
Dios, aunque suene mal, que suena, ahora mismo eres testigo del mayor terremoto de Sudamérica de los últimos 50 años. Podrías escribirte crónicas brutales desde el meollo de la cuestión. Hazte free-lance y vende tus informaciones al mejor postor. Yo lo haría, pero claro, yo es que soy un poco hijoputa y esas cosas...
Espero que se te haya pasado el susto. Ánimo.
Cómo es eso de que se mueva el suelo? Yo siempre he querido experimentar un terremoto. Aunque bueno, sé que suena estúpido porque acarrea mucha tragedia humana el tema.
Espero que estés bien.
Joe mis niñas!!! Pero que mala suerte tenéis. Bueno Soni, por lo menos se rompió el gafe de nunca estar en el "epicentro" de la noticia.
Besos.
No está nada mal...te pilla allí la muerte de Pinochet, en Santiago; te pilla en Perú el terremoto, esto último es una putada, pero para un periodista es una gran suerte. Un beso enorme, Kapucinska!
ehhh... ese don de la oportunidad tuyo tienes que hacértelo mirar, niña. besinos y orfidales a cascoporro.
Queridos y querida, os escribo desde mi hermosísima casita santiaguina. To start with, diré que yo tb tengo mi pequeña dosis de hijoputez piriodística que me hubiera llevado, sin duda, a aprovechar la desgracia ajena (que al fin y al cabo no es culpa mía) para hacer carrera. Lo hubiera hecho y no voy a decir que no, porque sería mentir como una reporterilla de la prensa rosa, y eso sí que no, que una tiene sus escrúpulos. El tema es que un inoportuno virus estomacal se adelantó a mi intrepidez periodística y me ancló al retrete del hotel de tropemil estrellas desde el que viví finalmente la noticia. Con la tele local a todo volumen, para escucharla desde el baño, eso sí. Y poco más os puedo contar, después de esta extraña experiencia desde el borde de la noticia (me aproximo al centro), partimos para Chile 28 horas más tarde de lo previsto y fuimos directitas al trabajo, como las niñas buenas que somos. Después, me eché una siestecilla de unas 16 horas de la que me acabo de despertar como una rosa, oyes.
En fin, una historia con la que os daré la lata ante más de una y de dos copas, eso fijo.
Bicos australes a tod@s.
Dios, eso sí que es un auténtico terremoto estomacal!!
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